miércoles, noviembre 17, 2010

Cita

-Sea puntual. Se lo suplico.

-Pierda cuidado. Allí estaré.
Pero, ¿cómo podré reconocerle?

-Oh, es sencillo, portaré un clavel rojo en la solapa del abrigo.
¿Y cómo sabré que es usted a quien busco?

-Simplemente pondré una pluma blanca en mi sombrero de ala ancha.

3 comentarios:

eV-oL dijo...

nunca dejes de postear, no seas como yo.

ale san dijo...

En ocasiones no hay nada que decir... lo "malo" es que el silencio se alargue. Saludos Liz.

glenda dijo...

por poco y olvido el clavel rojo en la solapa...