La vida de Calavacín o Ma Vie De Courgette, nos enseña que para denunciar el olvido y maltrato a la niñez no es necesario hacer un drama.
Una maravilla de animación stop motion, con personajes de cabezas gigante, brazos extra largos, nariz y orejas rojas, hechos con una mezcla de silicona, tela, resina o espuma de látex.
No hay comentarios:
Publicar un comentario